El cerro sobre el que se asienta es de un color rojizo característico, del que en el pasado se extraía barro para cocer tejas y adobes, y su caserío tradicional aún mantiene ese tono. Destaca especialmente la iglesia de la Natividad, una de las más impresionantes y características del románico castellano.
Estuvo integrada en la Comunidad de Villa y Tierra de Ayllón en el Sexmo de Mazagatos. El municipio, independiente hasta esa fecha, fue agregado como pedanías de Ayllón en 1970 y se sitúa en un cerro que domina la vega del río Riaza, junto a la carretera N-110.
Se le conoce como el pueblo “de las tres mentiras, porque ni es Santa, ni es María, ni es de Riaza”.
Está a 2,6 Km de Ayllón. Saldaña de Ayllón está a 5,6 km.